Recuerdo aún cuando Mirella era pequeñita y mostró por primera vez su fascinación por la luna. Recuerdo que era una noche de verano y Daniel la tenía en brazos, de pié, justo en el umbral de la primera casa en la que vivimos juntos. Mirella miraba la luna, esa noche brillaba en todo su resplandor de luna llena, y Daniel le contaba que cada noche la luna se iba a hacer más pequeña, más pequeña y más pequeña, hasta desaparecer. Pero luego hubiese vuelto a mostrarse en el cielo, siempre un poco más grande y siempre más hasta volver así tal como la veíamos en ese preciso instante. Mirella miraba a la luna embobada, y a su padre, como un héroe increíble! El año siguiente salió "Papá por favor consígueme la luna" de Eric Carle, e inevitablemente Daniel se lo regaló. Desde entonces la fascinación por la luna no ha menguado (nunca mejor dicho) y cada vez que encontramos un cuento que la tiene como protagonista estamos encantad@s! Así que hoy, después de esta larga premisa os hablo del último cuento llegado a casa sobre la luna: "Cubrelunas"
Cubrelunas
Autor: Éric Puybaret
Editorial: Vicens Vives
+3 años
Trama
Nino es el nuevo encargado de tapar la luna con su gran manto para que veamos cada noche una luna distinta que cambia de su tamaño. Para poder desempeñar su trabajo le entregan una pastilla que le ayudará a llegar hasta la luna. Pero Nino pierde su pastilla y no sabe como hacer para poder llegar hasta la luna. Uno a uno todos los habitantes del pueblo intentarán ayudarlo, y uniendo sus fuerzas conseguirán que Nino alcance la luna.
Contenidos y Valores
Como siempre los cuentos sencillos son capaces de dar mucho de sí. Y también en este caso podemos apreciar la riqueza de mensajes que el autor francés Éric Puybaret es capaz de transmitirnos.
Para empezar estamos frente a un cuento lleno de magia. El autor no pretende explicarnos la razón verdadera del cambio del tamaño de la luna, nos propone directamente una historia imaginativa pero que de forma indirecta si que tiene que ver con lo que realmente pasa con las fases lunares: la luna nunca cambia su tamaño, pero si que disminuye la superficie que vemos, porque esta no recibe la luz refleja del sol. Así que sin adentrarse en la explicación científica, el autor empieza a proponer una primera clave, imaginativa, para entender el ciclo lunar.
Pero la clave de este cuento no es ciertamente esta. Los personajes que se suceden en el cuento actúan tod@s con la intención de ofrecer su ayuda al pequeño Nino: cada un@ a su manera, basándose en sus conocimientos y en sus medios propondrán un sinfín de soluciones. Estupendos los detalles con los que se representan los personajes: nos quedamos particularmente fascinadas por Matilde la juguetera que lleva en su sombrero un trenecito de vapor que echa humo!
Pero ninguna de las soluciones propuestas e intentadas conseguirán ayudar a Nino. Para que Nino pueda alcanzar la luna tendrán que unir sus fuerzas, y no harán falta sus peculiaridades y conocimientos, solo hará falta su ser, su presencia, su disponibilidad. Apoyándose el uno con el otro, formarán una escalera humana altísima sobre la que Nino se apoyará hasta llegar a la luna.
El valor de la amistad y de la cooperación representan la esencia misma de este cuento. Una historia tierna pero a la vez rica de humor: un cuento precioso para ser leído y vuelto a leer con nuestr@s peques y que me siento de recomendar como cuento para leer en Navidad, ya que transmite todos esos valores que están a la origen de esta celebración.
Ilustraciones
Éric Puybaret identifica come Cubrelunas como su primer trabajo que le dio satisfacción. El primero de muchos, ya que en Francia tiene publicados ¡ya más de 20 títulos!
La técnica que ha utilizado para las ilustraciones de Cubrelunas es de acrílico sobre lienzo, construyendo un mundo que evoca el mundo onírico y en el que sus personajes representan a través de sus características físicas también su personalidad. Es el primer cuento que conozco de este autor, pero estoy segura de que buscaré mucho más sobre él, ¡me ha encantado!
Para qué y para quién
Como ya dije antes es un precioso cuento para empezar a introducir el concepto de los ciclos lunares, pero dejando aún espacio a la fantasía aunque en la parte final del cuento aparecen unas páginas de actividades donde se propone a nuestr@s pequeñ@s lector@s de investigar sobre la razón científica de los ciclos lunares.
Perfecta herramienta para l@s que están empezando la lectura autónoma ya que tiene bastante texto, pero al estar muy bien integrado e intercalado con las ilustraciones no cansa ni agobia.
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